A quien tenga mi bicla Fénix que perdí hace cuatro años

Sube el viejo a la bicicleta negra. Pisa el pedal, levanta la pierna, sube, avanza despacio. Bici negra como la mía que perdí hace cuatro años, bici china como la mía que ahora tengo, que compré luego de perder a la bi mía de antes. ¿Dónde estará mi bicla, quién la usará, cómo se llevará con ella? O talvez esté parada en un patio, a la sombra, ¡o con todo el sol!, apoyada a la pared, quieta, sin salir, sola, sin ser usada. Talvez la usa un viejo, yendo en ella muy despacio, con la llanta trasera un tanto desinflada, como dispositivo de amortiguación. Talvez un muchacho, que le sacó los guardabarros y la parrilla, desconsiderado, la hace correr a toda mecha.

Algo quisiera decirle a quien la tenga: el estén del manubrio es corto, esto es peligroso, mejor cambiarlo pronto. La bicla es fiel, si la cuidas, la atiendes y la acaricias, ella te avisa antes de romperse por donde sería peligro para ti. Mantenla con cariño.

Dejo la pantalla, salgo a la acera pa fumar un pucho. A mi lado mismo, baja al vuelo, lanzando la pierna derecha hacia atrás, pisando aun el pedal el pie izquierdo -- maniobra que nunca hice -- un hombre -- que entra a este negocio a comprar tarjetas de postpago de teléfono móvil -- que instala el parador que eleva la rueda trasera de una bicicleta negra como la mía que, veo, tiene muy gastada la pintura de la parte anterior de la barra superior. ¿Qué hará, cómo la montará? Cada quien tiene su modo con su bicicleta.

¿Dónde estará mi bicla? Yo tengo una otra bi. Estoy contengo con ella, me llevo bien con ella, empieza la máquina a responder a mi trato suave. Le digo cosas. Nos entendemos. Me disculpo por cargarla con tanto peso. Hay una relación. Pero hoy recuerdo a mi bicla.

La Fénix en este cuaderno ciclista :

http://cuadernociclista.blogspot.com/2017/08/del-diario-ciclista-mo_21.html
http://cuadernociclista.blogspot.com/2013/04/pronto-de-nuevo-la-fenix-para-mi.html
http://cuadernociclista.blogspot.com/2013/08/fenix-posada.html
http://cuadernociclista.blogspot.com/2013/09/mi-perdida.html
http://cuadernociclista.blogspot.com/2013/09/nave-nueva.html
http://cuadernociclista.blogspot.com/2014/11/aqui-adentro.html

Carreras

Hoy miércoles en la mañana, mi hijo corrió bici montaña, con otros dieciséis, la carrera departamental para clasificar a los juegos plurinacionales. Eran dieciséis vueltas, de dos kilómetros y medio cada una. A la primera vuelta, ya estaba cerca de la cola. En la vuelta siete, el puntero lo pasó, con lo que, de acuerdo con la norma de la carrera, mi hijo tuvo que retirarse. Ay.

[Esto es de la cuarta semana de mayo.] Ayer a mediodía, mi hijo terminaba número cuatro en una carrera de bicicletas. Fue especial el flaco ahí arriba, en el parque Qhora : si no hubiera sido porque rompió cadena, pudo haber terminado primero con unas tres vueltas (de las 25 que dieron los corredores) de ventaja sobre el segundo. Completando la cuarta vuelta, cuando llevaba más de una vuelta de ventaja sobre el segundo, rompió cadena, bajó ocho cuadras a Tiquipaya a la bicicletera doña Juana, ella arregló, subió a la bici, a la media cuadra volvió a romper cadena, bajó de nuevo, la maestra arregló de nuevo, tardando mucho para garantizar que la cadena no se rompiera en el par de eslabones donde ella la reunió no muy maestramente, subió hasta el lugar de la competencia, en la que se había quedado siete vueltas por detrás de los otros, y fue recuperando, hasta que como digo salió cuarto. Un poco más de hora y media de competición. Si la carrera hubiera durado las 36 vueltas inicialmente planificadas, talvez mi hijo habría aguantado y ganado. Pero los organizadores cambiaron la duración de la prueba en medio de ella, pensando en no sobreagotar a los chicos. Era cosa especial. Parecía el flaco de otro, superior nivel, delante de los otros ciclistas, iba a otro ritmo. Justo antes de rompérsele la cadena, me decía yo, viéndolo suber la cuesta empinada por la que los corredores volvían de la parte baja hacia la parte alta del trazado, me decía: "Aquí llega la venganza sobre pedales". Acabada la carrera, uno de los muchachos le dijo algo que resume lo que digo, que el flaco es mejor que ellos, que está a otro nivel.

Hoy en la mañana, volviendo del punto medio del circuito, botellas plásticas vacías de bebidas estimulantes que algunos corredores tiraron al asfalto, latas de lo mismo en el suelo. Antes de la partida, un amigo corredor ciclista nos cuenta que no sé cuál fábrica de bicicletas de carrera hizo alianza con no sé qué otra fábrica de autos de carrera, y habla de una segunda de esas alianzas, y de una tercera, y dice el precio, de cinco dígitos, de no sé qué bici prototipo... Y ahí llega una familia, padre, madre y hijo corredor, en una vagoneta muy ancha y larga, pintada de color plomo reluciente. Retiran la bicicleta de carrera que iba atornillada o agarrada en la puerta trasera. Instalan una sombrilla de colores pastel. Recuerdo una noche de la semana pasada, en que acompañé a mi hijo a alquilar la bici con la que corrió hoy. Una casa en el centro de la ciudad, en barrio residencial, con pocos comercios. Es tarde en la noche. La casa tiene tres puertas de garaje, todo el frente de ella son garajes. Sospecho que es por eso que su acera no tiene árboles, a diferencia de las otras casas de la cuadra, que conservan algunos de los muy viejos árboles (deben tener hasta ochenta años) de esa calle Colombia (cuyo nombre no sé; ya lo averiguaré). Al salir, mi hijo me cuenta que en el taller que en esa casa hay, vio en el suelo bicicletas caras (de poco más o menos de mil dólares). El mecánico que le alquiló la bici, quien también corre en bicicleta, llegó cuando nosotros lo esperábamos en la calle, llegó en moto, de su trabajo como instructor de spinning en un gimnasio. Spinning es el manejo de bicicletas estacionarias.

Imagino lo que pensó uno de esos muchachos que botaron como basura el envase de la bebida con que soquetearon a su cuerpo en el intento de rendir más al pedal para, quería el muchacho, ganar, llegar primero. Talvez en esta carrera no pensó nada al tirar lo que para él es basura y para la ciudad es desastre. Pero la primera vez que lo hizo en plena carrera, ha debido pensar así: "No importa, correr es lo que vale, ya habrá alguien que alce esta basura, para eso pagamos impuestos, la alcaldía tiene empleados que barren cada día el suelo, yo seguiré nomás corriendo, mejor me apuro, quiero ganar".

Sobre el tema de mi hijo corredor de bici, http://cuadernociclista.blogspot.com/2017/06/un-corredor-en-bici.html.

Alerta, defensa del Tipnis

http://paginasiete.bo/nacional/2017/8/30/lideres-tipnis-declaran-alerta-anuncian-acciones-150245.html

Líderes del TIPNIS declaran alerta y anuncian acciones

En el reciente encuentro de corregidores y comunidades, los originarios rechazaron la puesta en vigencia de Ley 969, que anuló la 'intangibilidad' de la reserva.

miércoles, 30 de agosto de 2017

Lorena Rojas Paz / La Paz

En el reciente ((32avo)) encuentro extraordinario de comunidades y corregidores del TIPNIS, realizado del 25 al 28 de agosto, se rechazó la nueva ley que elimina la "intangibilidad” de esa reserva natural. Los originarios también se declararon en estado de emergencia y anunciaron medidas que van desde foros y hasta marchas para defender su territorio. En la segunda resolución que emitió el encuentro, los participantes anuncian "medidas de hecho” para defender el área protegida, como vigilias, talleres, foros, marchas y bloqueos.

También se declaran en "alerta” para tomar acciones legales en torno: a seguimiento a la demanda a la CIDH (Comisión Interamericana de Derechos Humanos) sobre el caso Chaparina, acción de inconstitucionalidad por la Ley 969, hasta "una auditoría técnica jurídica internacional a la supuesta consulta efectuado por el Gobierno el 2012”.

Los asistentes del encuentro objetaron la puesta en vigencia de la nueva ley y reiteraron su rechazo a la vía a través del corazón del área protegida. "Rechazamos la promulgación de la Ley Nº 969 de 13 de agosto de 2017 que abroga a la Ley Nº 180 de 24 de octubre de 2011. Los pueblos indígenas del TIPNIS nunca solicitamos su abrogación y aclaramos al pueblo boliviano que rechazamos la carretera que parte el corazón del TIPNIS”, se lee en el voto resolutivo que emitieron al concluir el evento.

En el documento también  advierten  que los pueblos indígenas que viven en el territorio originario están en riesgo de desaparecer  debido a la puesta en vigencia de la nueva norma. "Denunciamos a los organismos internacionales que las naciones y pueblos indígenas del TIPNIS estamos en serios riesgos de extinción, biocidio  etnocidio con la promulgación de la Ley Nº 969 de 13 de agosto de 2017 que promulgó el Presidente de Evo Morales Ayma”, se lee en el artículo 2 del texto.

Según la resolución, el encuentro de corregidores y comunidades del territorio indígena fue  dirigido por el directorio de la Sub-Central del TIPNIS encabezado por su presidente, Fabián Gil Rocha, y por la presidenta de la Organización de Mujeres, Marqueza Teco.

"Considerando que la política del actual Gobierno viene violando flagrantemente nuestros derechos como naciones y pueblos indígenas que habitamos el Territorio que es nuestro hábitat...”, así comienza el documento que emitieron los asistentes. En el encuentro, según el voto resolutivo, se estableció que "los pueblos indígenas nunca estuvieron en contra del desarrollo y articulación de los departamentos de Beni y Cochabamba” y que sólo exigen que dicha vinculación "no pase por el corazón del TIPNIS”.

El encuentro

Reunión. El XXXII Encuentro Extraordinario de Corregidores y Comunidades del TIPNIS fue convocado con el objetivo de reafirmar el rechazo a la abrogación de la Ley 180, la cual vetó la construcción de la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos.

Detalles. Participaron como veedores la presidenta de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia, Amparo Carvajal, el exdefensor del Pueblo Rolando Villena, y el exdirigente del Consejo de Ayllus y Markas del Qullasuyo Rafael Quispe, quien hoy es diputado nacional.

Resolución. En el encuentro se rechazó la  Ley 969, que fue promulgada por el presidente Evo Morales el pasado 13 de agosto.

El mal

Está en la cara del hombre, en el gesto de la mujer detrás del volante, cuyo pie aprieta el acelerador y alimenta de combustible el motor que ruge del auto que me amenaza, está en rictus con que sigue adelante, destruyendo el mundo con su motor, negligiendo al otro en la calle : ahí está el fracaso de hombres y mujeres : siglos de buscar actualizar la potencia usando a otros hombres, usando animales, usando máquinas desembocan en el automóvil, un millón cuatrocientos mil muertos y cincuenta y cuatro millones de heridos por hombres y mujeres que manejan carros en 2013 (https://en.wikipedia.org/wiki/Traffic_collision). Está en el ruido que hace un carro cerca de mí, acelerando, amenazando, asediando, el motorista quiere que yo sepa que, para él, yo no valgo, pues yo soy un hombre y en cambio él es un apéndice de la máquina de muerte final y total instalada en este mundo, inspirada por el mismo mal.

[Quiero enlazar esto de la cara del motorista y su gesto como el mal sin atenuante, con cantidad de situaciones tipo en medio de la calle hoy aquí, que son el mal, situaciones en que peatones y ciclistas somos amenazados, asediados. Quiero enlazar estas dos cosas con muchas otras cosas... pero no puedo ahora, no puedo, en la cabeza, y aun en los ensayos de discurso, es decir, de emisión ante gente, hablando, me sale; pero para escribir, al tiro me siento incapaz, como si no fuera a salir nada más que un disparo de fanático.]

Dos incidentes de anoche

La placa era 1246 DBT, la marca Nissan, de la vagoneta mediana, de color verde oscuro que anoche viernes, a las diez, en la esquina de Baptista y Jordán, tocó, rozo la mochila de mi hijo que estaba parado junto a mí, junto al pretil de la acera, ambos montando bicicletas. Lo hizo para pasar por la derecha al motorista que ocupaba el carril único de esa calle relativamente estrecha. Perseguí a la motorista mujer, de unos treinta años, hasta la esquina de la plaza, donde ella tomó la Sucre, a toda velocidad; al llegar a la esquina con calle 25, pasó el semáforo en rojo, yo siguiéndola todavía, hasta la esquina con San Martín, donde el rojo -- y el flujo de vehículos por la calle perpendicular -- la detuvo. Ahí pude recién ver su placa.

A las once y cuarto de la noche, en la avenida Simón López, el carro con placa ..., que entraba al surtidor que hay unas cuadras antes del cruce Taquiña, pasó demasiado cerca de nosotros dos ciclistas.

Es cosa de la chicharra

Agachado, agarrándome de la parrilla de mi bicicleta, golpeo suave la tapa de la chicharra o flywheel. Giro el pedal, que aun no engancha, no tracciona. Golpeo muy leve la chicharra, pruebo a mover el pedal, sigo haciendo así hasta que algo dentro de la pieza coge otro algo y el pedal, al moverse, moverá a la máquina. Así van ya tres días. Tengo otra chicharra para cambiar a la actual inestable, pero no quiero hacerlo aun, quiero ver en qué acaba esto. Además, creo que la chicharra actual es salvable. La bici no falla en movimiento; es cuando la dejo unas horas parada que, de entrada, no arranca, y hay que sobarle la flywheel.

Por otro lado, nunca en los últimos meses estuvo tan bien el freno trasero. Y as[i voy confiado en ella bi.

Incidente en la Costanera

Placa 082 RRF, camioneta Ford de carrocería larga, de las que ciertos cochabambinos usan para floridizarse, tejanizarse, motorista de hasta sesenta años. Luego del incidente (que no relataré), disminuye su velocidad a casi cero y se queda cerca, para responder a mi grito de "Cobarde, usas tu auto para amenazar a la gente". Replica: "Pero estabas en mitad de la calle". Aclaro: "¿Dónde más voy a estar? Uso la calle". Así son, suponen que podrán sacarnos de la calle, algunos motoristas. Y hoy a las dos de la tarde, en ese lugar, la Costanera cerca de donde desemboca en ella la Junín, este motorista casi que lo logró. Lo mío fue patalear, quejarme. Pero mi voz es fuerte. Que ellos no nos retiren de la calle, que los ciclistas subsistamos en ella, con dignidad, dependerá de nosotros –– y de que no se nos cruce o logremos evadir el cruce de ningún bienintencionado que, pretendiéndose ciclista, pero en realidad sin saber dónde está parado y usando los temas equivocados y las propuestas falsas, persigue sus intereses que a nosotros nos perjudican.

Mapa vial. Lanza entre Heroínas y Sucre

Mapa vial ciclista. La calle Lanza entre avenida Heroínas y calle Sucre, esas dos cuadras tienen un problema para los ciclistas: siendo angostas y congestionadas en las horas hábiles del día, el extremo izquierdo de la calzada, ese como lecho para que corra agua pluvial que, en los tres o cuatro últimos años, en muchas calles del centro excavaron y cubrieron con cemento, está mal acabado, o mejor, luego de haber sido construido, el tráfico de los pesados carros fue empujando la capa superficial del recalentado asfalto hacia, a veces, encimar parte del cemento de la acequia, de manera no uniforme, y entonces hay un reborde que en lugares es alto; un ciclista puede hallarlo incómodo y hasta peligroso.

Sombrero ciclista / casco motoquero

Mediodía. Sombrero negro usa la niña vestida de negro que va sobre la barra de la bicicleta. La madre, también de negro, con la cabeza descubierta. Parque Demetrio Canelas con avenida Medinaceli, hoy.

Comparación con el motoquero que cede su casco a su compañera. La ciclista protege a su hija del calor del sol; la ciclista amenaza poco a los circunstantes. El motoquero "protege" a su amiga del peligro del tráfico del que, en parte, también él es causa; él amenaza a los circunstantes con su masa y velocidad.

Vistos los tres ciclistas

Vistos desde fuera de la burbuja que para sí crearon durante media hora los tres ciclistas anoche jueves por las calles del centro de Cochabamba, vistos por alguien que hubiera manejado un auto cerca de ellos, quizás detrás de ellos, impedido por un momento por los tres ciclistas en fila, de ir a su ritmo motorista, por alguien que haya sido una persona que se hubiera puesto a mirarnos, abriendo, curioso o intrigada, los ojos, o, para qué poner un motorista, da igual que no sea un motorista, vistos los tres ciclistas por alguien que, caminando por una acera, reparase en el trío inusual de ciclistas de noche, y, si ese peatón o peatona, deteniendo su paso, se hubiera puesto a mirarnos : cómo, simplemente, ocupábamos la calle, el centro de ella, íbamos por el mero medio de la vía, ¿qué fuimos nosotros tres?

Fuimos la masa crítica. Fuimos ciclistas. Ciclistas en la Cochabamba.

Habiendo sido, ante nosotros, estas cosas, la masa y los ciclistas, lo seremos más después, con esas palabras –– masa crítica, ciclistas –– saliendo más veces, con mayor regularidad aun, y cuando demos qué hablar, porque damos qué hacer.

Por la calle Mayor Rocha, llegando a la plazuela Colón, R. joven conversa con O., están amistando. El chinchoso R. viejo, a la izquierda, que se queda sin quién hablar, les recuerda que hay motoristas atrás, que los ciclistas también tienen que ocuparse de eso, que el que viene aquí parece inquieto, vean, les dice, ya toca bocina, pero no lo oyen, porque la bocina le tapa la voz. Ellos siguen con que la esposa así (también maneja, desde chica, y lo sigue haciendo, cuenta el ciclista), el hijo niño asá (le hará mantenimiento a su bici pequeña enana para la navidad, dice el otro ciclista).

Yo, ahora, después de la masa crítica de la noche del jueves, yo, uno de los maduros tres hombres que con bicicletas salieron la pasada noche a usar juntos unas calles de esta ciudad, necesito imaginar, creer que algunos, alguien siempre nos vio en la calle, sobre nuestras bicicletas, a nosotros tres.

Republico de la cuarta semana de diciembre de 2011.

Noticias del automóvil

Ayer en Barcelona un motorista, entrando a una vía peatonal, mató con su carro a trece personas y hirió al menos a cien. La semana pasada, en Charottesville un motorista atacó a unos manifestantes y mató con su carro a una mujer y hirió a diecinueve.

Referencias

https://en.wikipedia.org/wiki/2017_Barcelona_attack
https://en.wikipedia.org/wiki/Unite_the_Right_rally

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-- Cinco días después

Tecnología. Llegan las máquinas expendedoras de autos

... Yu Wei, gerente general de la división automotriz de Alibaba: “comprar un auto será tan sencillo como comprar una lata de Coca-Cola”. Las máquinas serán edificios en forma de garaje, donde el usuario podrá elegir el auto de su preferencia por medio de una aplicación móvil. ... El cliente tendrá que probar que tiene buenos antecedentes crediticios por medio del sistema Sesame Credit. ... pago inicial y desglosar el resto en mensualidades. ... Este servicio está enfocado en gente de altos ingresos. ... Autobahn Motors abrió una lujosa sala de exposición de 15 pisos en Singapur y que fue presentada como la "máquina expendedora de autos de lujo más grande del mundo" ... Carvana, una compañía estadounidense de venta de coches usados online, ha construido versiones más modestas de este edificio en Tennessee y Texas. ...

Fuente: http://www.lostiempos.com/tendencias/tecnologia/20170823/llegan-maquinas-expendedoras-autos

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Más noticias del automóvil: http://cuadernociclista.blogspot.com/2017/11/ciclovia-invadida-por-carro.html

Viejo taller de bicicletas

Cambié chicharra, o mejor diré, hice cambiar la chicharra de la bicicleta. Al subir a la bi y hundir por primera vez la pata en el pedal, la rueda giró menos que lo esperado, menos que lo accionado; antes, giró la chicharra, atornillándose en su lugar (ver https://ciclistasdevalle.blogspot.com/search?q=barro+rojo). También hubo cambio de macero trasero y de otras partes menores.

El maestro bicicletero de frente al estadio atiende a mi bicicleta desde hace dos meses. Es hijo de un buen mecánico, que, según me cuentan, ahora arregla motos en Santa Cruz.

Mientras el mecánico trenzaba las varillas de la rueda de mi bi, una diligencia me hizo entrar a la casa del lado del taller. Vi desde ahí el techo del taller, algo de lo que hay sobre él, y el espacio de entre techo y paredes. Recordé entonces cómo los vecinos de la calle Avaroa, al lado de la laguna Alalay, apretaron hace tres años al bicicletero Gallo hasta lograr que su dueño de casa lo botara, acusándolo de que la acumulación de tubos en desorden, que llenaba el espacio de un galpón de, calculo, tres por cinco metros, era nido de roedores, insistiendo que el taller daba mala imagen al barrio, y así. (Uno de esos vecinos, masista policíaco.) No es que Marcos de frente al estadio se parezca a los maestros acumuladores de piezas y bicis viejas; casi no tiene nada guardado. Se trata del aspecto de viejo, de, diré, natural, subsistente, real de su lugar, visto desde fuera, en este caso, desde el corredor de un comedor peruano, donde, por los precios, yo no comeré.

Molle que muere

Es un molle, es viejo, era grande. Lo están arrancando, ahora, mientras escribo esto -- que es miércoles 16 de agosto de 2017, a las tres y media de la tarde -- un amigo mío, por medio de un obrero, arranca un molle de cuarenta años, para hacer campo en su patio delantero para que, en vez de dos carros, entren tres. Yo estuve ahí en la mañana. El hijo del talador, también mi amigo, trató de impedir el derribe, y no pudo: ganaron los tres carros. En una semana iré a conversar con el amigo viejo que tala el árbol sano, grueso, diciendo que le había dado muchas vueltas al asunto, sin hallar salida más que sacar el árbol; iré a conversar con él, hablaremos de literatura, de uno y otro escritor; pero del árbol, no. No tiene caso. En cambio, este apunte se lo mostraré a su hijo.

Cuántas veces

Cuántas veces un ciclista adelante y el otro ciclista que puede ir a su lado pero no quiere, se atrasa, no se pone a la par, y entonces, la conversación se entrecorta porque el de atrás se puede hacer oír, hablando hacia el frente, pero el de adelante debe volver la cabeza para que el rezagado lo escuche. Y al final van callados. Separados. Cuántas veces entiende el uno y parece entender el otro que se puede, que vale, que es rico ir codo a codo, lado a lado hombro con hombro, pero no se hace, gana la costumbre del pedal solitario y van separados. Tampoco se trata de una obligación. Es una opción, el ir juntos. A veces es la mejor opción. A veces es solo una de ellas.

-- Reescribir. Poner lo que falta, que el no juntarnos nos danha, que se trata de que cada uno ceda al otro, de engranar..., que es al enemigo a quien le conviene que no congeniemos.

Molle negro

El color negro del tronco de ese molle que está en la jardinera central de la costanera interna en la boca de la calle Junín talvez sea por el hollín de los escapes de los carros que en ese lugar, por uno de los carriles, aceleran de salida del puente cavado que viene de la Recoleta o, por el otro carril, aceleran desde el puente Cobija para entrar a ese puente que va hacia el este. Es la cara noreste del tronco, la que da a los autos que se vienen cerca, la negra.

(Habrá que preguntar a gente que sabe si, por ejemplo, los troncos de las palmeras de la avenida Libertador Bolívar, con mucho tráfico rápido, muestran diferencias en la cantidad de carboncillo que se les queda en sus superficies respecto a, ejemplo, los de las palmas de la avenida Heroínas, con menos tráfico más lento. También podría yo, mejor si acompañado, ir a esos lugares con un trapo húmedo, pasarlo por los troncos, muy despacio, atento, mirando, y, pues, ver cómo la tela ennegrece... experiencia a hacer en cualquier lugar de la ciudad, en cualquier parte de las casas: sobre los muebles más encerrados, hay cúmulos de carbón automotriz.)

Hay allí un puente peatonal que lleva a la parte trasera del estadio. A la gente a pata y a nosotros los ciclistas nos cuesta hacernos respetar con los desesperados al motor para pasar, a pie, esa vía ancha y rápida. La jardinera es ancha. El molle tiene el tronco negro. Es un molle grande, de más de treinta años.

Cuánto sol quiero hoy

Se demora la minuciosa inundación del valle por la luz. Antes de salir, el sol va aclarando el aire, las estrellas se apagan, pero la luna, de la mitad de su tamaño lleno y en el punto medio del cielo, cuya capa superior está ya abiertamente alumbrada, la luna, traslúcida, se ve, se quedará en el día. El amanecer. Se difumina la rígida separación del aire en un una región clara, arriba, y otra, oscura, donde yo estoy. Ahora todo cobra luz, pero ella no toca aun mis rodillas, la parte elevada de mi cuerpo, y falta mucho para, después de ser cubierto por el sol, empezar a recibir su calor en las manos, enlazadas tras la nuca. No flor sino rocío es lo que el aleteante pájaro pica en las puntas de las hojas del abeto cuya copa tiene todo el sol.

Agosto 2012.

Tipnis resiste

(Todo lo que leo en estos días, noticias de hoy, es amenaza de destrucción masiva nuclear, historia de ayer, destrucción masiva fascista. Junto a la amenaza presente, la dignidad de los hombres, de los pueblos que resisten. Entre medio del holocausto pasado -- quizá menor que el holocausto en curso -- la esperanza, en la boca del horno, el consuelo. Señor Jesús, salva tú lo que está por perderse. Señor Dios encarnado, justo asesinado, hombre resucitado, dinos hoy si hay un mañana por fuera del ciego caer en el abismo.)

Supongamos que los del gobierno se salgan con la suya, que acaben de hacer la carretera que partiría el territorio enmarcado por los ríos Isiboro y Sécure, la carretera que destruiría a personas, familias, comunidades indígenas ricas en saberes milenarios de subsistencia, saberes de salvación, supongamos que, para pagar a sus ávidos cocaleros, pagar a sus patrones petroleros extranjeros, los del gobierno terminen la carretera que en pocos años mataría millones de árboles, multitudes de animales, poblaciones enteras de vida. ¿Cómo deberíamos entonces los bolivianos castigar a esos criminales? Demasiado grande sería su daño. No habría cómo ellos resarzan. Actuemos ahora. Impidámosles el crimen. ¿Y cómo de pobre, de triste sería nuestra vida entonces? ¿De dónde sacaríamos la esperanza para seguir? ¿Con qué cara nos veríamos entre nosotros mismos? ¿Cómo le hablaríamos a Dios, si en un futuro no hubiera ya Isiboro Sécure? Detengamos la construcción de la carretera.

¡Tipnis resiste!

La apropiación. Los ciclistas jailas se adueñan de la escena pública

"... la bici no es el transporte del pobre, sino es el transporte de las personas cultas...", dice el entrevistado (en el video inserto en http://www.lostiempos.com/actualidad/local/20170803/alcalde-promulga-ley-bicicleta-ciclistas-festejan-caravana, y en otro lugar, https://www.youtube.com/watch?v=Ulu8kq2wjZI) entrevistado que festeja la ley de la bicicleta, que es la que, dice, dirá a la gente eso, que los ciclistas no son pobres, que son cultos...

¿Por quiénes nos toman? Creen que vamos a comprar esta mentira. ¡Un discurseador, imbuido de técnicas de márquetin, alaba con falsedad a su audiencia! Para venderte un par de zapatos usados, rotos, te dicen que son los adecuados para la forma especial de tus pies...

Y no, no es como dice aquel propagandeador. En Cochabamba, usamos bicicleta, primero, quienes tenemos necesidad de ella porque es barata, es decir, los pobres; y, segundo, quienes gustamos de ella, es decir, los activos o inquietos. Relación entre montar bici y ser culto, no veo ninguna.

Otra cosa es que hace unos años crecen aquí los negocios que buscan encarecer los costos de las bicicletas y sus repuestos. Alimentándose de los discursos mellizos de la bici verde y de la bici salud, estos negocios venden bicicletas más caras, cobran más por la reparación mecánica, cobran más por los repuestos. Se está armando, desde hace unos cinco años, un tinglado sobre el tema-negocio de la bici. Lo que es peor, los empresarios, su organización gremial, los periódicos, los políticos-autoridades, los que cuentan en términos de poder usan el tema-negocio de la bicicleta para impulsar una vía de probable amansamiento urbano -- amansamiento de la gente, su encarrilamiento para que salgan del paso de los poderosos.

Una parte de este aplacamiento social se hace con carriles bici, que segregan el tráfico en espacio grande para los caros, veloces y peligrosos, y espacio pequeño para los baratos, lentos e inermes. Esto podría ocurrir en la ciudad de Cochabamba, si los ciclistas lo permitimos. (Hoy viernes en la tarde, en la Oquendo entre Jordán y Sucre, me dijeron que el recién construido bordillo de hasta 10 cm de altura que separa un carril de hasta metro y medio de ancho a la izquierda de esa vía marca un carril bici. Averiguar. Esta construcción tiene hasta un mes de iniciada, antes de la aprobación, la semana pasada de la ley de la bicicleta. Incluso los vecinos protestaron contra el polvo provocado por las obras.)

El negocio de la bicicleta en Cochabamba son unas diez tiendas abiertas en los últimos cinco años en las zonas comerciales caras de la ciudad (con nexo con comercios en la zona del mercado "popular"), con ofertas de bicis desde 300 dólares y más. Al menos dos de estas tiendas venden, junto con bicicletas, vehículos a motor. Recambiar el macero-eje trasero de una bici de aquel precio cuesta cerca de 200 pesos, una sola pieza cuesta lo que toda una bicicleta usada en buen estado. Desde hace dos años, los maestros mecánicos cobran más por su atención. Inflar una llanta, que hasta hace siete o ocho años costaba veinte centavos, cuesta ahora cincuenta. Pero en los días del peatón y la bicicleta, en los últimos dos años, se sitúan en muchos lugares de la ciudad bicicleteros ocasionales, que cobran uno y hasta dos pesos por esa mínima atención.

(Es un curso parecido a lo que ocurre en otros rubros comerciales. Con la inundación de ropa y zapatos usados traídos de fuera del país, se ha despoblado la oferta de productos de precio medio: uno puede escoger entre lo barato de mala calidad, derrepente en mal estado, y lo caro de supuesta calidad media, pero también desechable. Este curso es el de una dependencia e indefensión mayor de los consumidores hacia los fabricantes y proveedores; lo que sufrimos hoy es que fabricantes y vendedores tienen la sartén más agarrada por el mango, y a nosotros los compradores no nos dejan ni patalear. Esto ocurre en los segmentos inferiores del mercado. En los segmentos superiores, donde las cosas cuestan más, los compradores retienen algo de su poder de negociación.)

¿Qué pasa con los ciclistas en Cochabamba? Entre los años noventa y hoy, disminución creciente de los antes numerosos ciclistas diarios de clase baja (albañiles, jardineros y parecidos). Desde hace unos tres años, en la calle se ve más ciclistas con bicis caras. Hay un escenario público donde el tema de la bicicleta es relacionado con la salud y el ambiente, escena ocupada por mestizos jailas. Hasta hay propagandas diversas por televisión que usan el tema bicicleta, relacionándolo con salud, esfuerzo físico, atracción física, niñez, juventud, solvencia económica. ¿Se puede llamar a esto una apropiación? Donde antes estaban tranquilos, silenciosos ciclistas diarios, ahora hay ruidosos alharacos ciclistas ocasionales (salen una o dos veces al mes en sus bicis impúdicas).

El discurso de la bici verde dice que manejando bici salvas al planeta, que la bici es limpia, que no contamina. Que los incautos se crean eso. La fabricación de bicicletas es tan contaminante, por peso y por costo, como la de cualquier automóvil; las materias primas que se usan en esa fabricación, la extracción de esas materias es tan sucia para el ambiente y dañina para las comunidades como toda minería. ¿No contamina el uso de la bicicleta? Depende de lo que entendamos por contaminar. Es un tema abierto. En todo caso, el uso jaila o clasemediano de la bicicleta está inmerso en un conjunto de hábitos y consumos muy contaminadores, está entretejido con ellos.

El discurso de la bici saludable dice que la bici te mantiene en forma, que controla tu peso, ayuda a tu corazón, y nosequé más. Puede ser, pasando cierto volumen de tiempo diario sobre la bicicleta; pero, antes de ese umbral, es probable que a algunas personas usar bicicleta les quite una caminata que, esta sí, las ayudaría físicamente.

Digo entonces que si nos dejamos los ciclistas diarios con bicicletas normales, ellos los jailas nos quitarán hasta el espacio donde pedalear nuestros ciclos.

Secretos para que los ciclistas urbanos eviten accidentes, por Valentín Quinteros

22.03.2010

"Secretos" para los ciclistas urbanos para evitar accidentes

Pongamos algo en claro, ¡la prudencia es esencial! Por mucho que se maneje un Hummer o una bici la prudencia es lo primero. En un año de ciclista urbano en Cocha no he usado la ciclovía, así que toda mi experiencia es en la calle, incluidas las más transitadas: Heroínas, Ayacucho, 6 de agosto, Aroma, Prado, 25 de mayo, Oquendo ... calles anchas, calles angostas ... [hasta ahora nunca en autopista o carretera; yo creo que próximamente].

Por otro lado, interesarse a la ecología no se reduce a hacer ciclismo urbano, ni siquiera a reciclar; pero de eso escribiré en otra serie de crónicas.

Llevo hasta el momento ocho años de ciclista urbano; poco menos de siete en Ginebra-Suiza y actualmente más de un año en Cochabamba-Bolivia. Es claro que la educación vial de la gente, en ambas sociedades, es muy muy diferente. Pero en ambos casos jamás un auto me causó ni el más mínimo rasguño [y yo tampoco a ellos :-)]. Sí me caí algunas veces en parques públicos en Suiza, pero fue por jugar con la bici en lluvia o en nieve desafiando la gravedad y en particular a la fuerza de fricción (NO lo hagan).

Mi experiencia me indica que no depende únicamente (ni siquiera mayoritariamente) de la educación vial de los conductores, sino de la precaución y prudencia personal del ciclista. (Irónicamente conocí más ciclistas accidentados en Suiza en siete y medio años de vida que en Cochabamba en los veinte años restantes, conozco ciclistas de mucho tiempo pero en su momento no sentía interés, pues como todos tenia miedo).

Cochabamba y Ginebra tienen la similitud de ser ciudades mayoritariamente planas, lo que facilita el desplazamiento en bicicleta, eso es evidente. Pero en Cochabamba, prácticamente comencé de cero: en efecto casi nadie usa guiñadores y entre ellos muy pocos lo hacen correctamente; en ciertos casos los semáforos son de adorno, en el mini carril que los ciclistas tenemos, nunca falta aquel que parquea su auto a un metro de la acera y tantas cosas más... y encima la gente en su desconocimiento te llena de miedo.

Sin embargo, en Cochabamba uso la misma estrategia que en Ginebra: Prudencia Prudencia Prudencia y más Prudencia.

Mucha gente se confía demasiado y tienen lo que en bomberos se conoce como "el complejo de súper hombre/mujer". Como anécdota un cuate que conocí creyó que porque podía manejar sin manos podía también hacerlo sin manos Y sin pies... evidentemente se cayó en el parqueo de autos de la tienda de donde acababa de comprar su bici; felizmente no pasó a mayores pero indica mi punto [y de veras que no fui yo].

He aquí mis tips para 0 accidentes en 8 años, se puede considerar un checklist:

• 1º Seguridad ante todo--> revisa tu bici. Cuando era inexperto y aún ahora siendo avanzado NUNCA me descuido en revisar:

A) Frenos funcionales (antes llevaba a un bicicletero, ahora lo hago yo mismo)
B) Casco que asegure bien (se consiguen en unos 30-50 bs) (Nota: ¡una caída y ya no sirve!)
C) Bicicleta en buenas condiciones (revisarla con frecuencia, más aun si la lluvia y la intemperie la agreden seguido)
D) Cintas reflectivas tanto para el casco como [y principalmente] para la bici, son útiles también en mochilas; otra opción son esos chalecos anaranjados que también tienen reflectivos, extremadamente útiles para ser visibles en la noche (incluso con baja luz)
E) Linterna de cabeza (muy importante para hacerse distinguir de noche), o mejor si se tiene luces de bicicleta [yo prefiero la linterna].

• 2º Maneja con tus 5 sentidos (No ipod, No celular, No leer, no saludar...).

Cuando manejo, todos mis sentidos están en la calle, jamás contesté el celular (antes usaba uno, ahora no), no hablo con la gente que llevo en la parrilla, incluso (y es la parte más difícil) hasta me abstengo de chequear el lindo panorama [aunque a veces me detengo y veo hacia atrás ;-] JAMÁS JAMÁS me distraigo mientras manejo, si tengo que hacer algo ME DETENGO en lugar seguro y lo hago; NUNCA EN MOVIMIENTO.

No beber manejando ni manejar bebido (en mi caso ni siquiera bebo).

• 3º Respeta las reglas de transito.

Por muy mal que funcionen o por más que otros no las respeten adecuadamente, las reglas de transito SÍ salvan vidas; y con el tiempo uno se da cuenta que sí hay algo de respeto a estas reglas por parte de los conductores.

- Semáforos / baritas
- Pasos peatonales
- Respetar el sentido de la calle
- MANTENER LA DERECHA.

• 4º Identifica los HOTSPOTS = "puntos calientes" (baches, lugar de mayor caos vehicular, zonas y horarios de borrachos,...).

Otro punto crucial es identificar los lugares y momentos de más riesgo: nuestras calles son pésimas [no descubrimos la pólvora al decirlo], el caos vehicular existe [tampoco es un descubrimiento], pero todo aquello responde a lugares bien marcados. Digan lo que digan, BOLIVIA NO ES UN CAOS en todo momento y en todo lugar. Los baches y el caos vehicular no son la excepción.

En primera instancia, y manejando lenta y cautelosamente, hago un reconocimiento de la calle que transito por primera vez. Los baches peligrosos no se mueven, ni aparecen espontáneamente, los identifico, los memorizo y cuando vuelvo a pasar por ahí los evito con facilidad, más aun si se vuelve una de mis rutas frecuentes. En paralelo hago exactamente lo mismo con el caos vehicular.

Mi lista de hotspots (o momentos en los que mi atención es aún mayor) :

* Puente de Calacala / Aroma / 25 de mayo/ Martadero
* Baches del estadio
* Las esquinas [pocos usan guiñador correctamente]
* Días de feria = miércoles y sábado
* Noches de fines de semana y riesgo de borrachos [los evito o uso la acera y/o me voy a pie]
* Calles sin luz [las evito o uso la acera y/o me voy a pie]
* Días de lluvia [si estoy en casa tomo trufi o micro, si estoy en la calle uso mi poncho o busco cobijo]
* Cansancio extremo [dejo la bici en casa, o si estoy en calle no dudo en ir lento o caminar]
* Puertas de autos cuando estoy muy cerca.

• 5º Velocidad y malabares divierten, pero pueden ser traicioneros.

Manejar sin manos, equilibrarme detenido sin bajar los pies, ganarle a un micro o a un auto, etc. En ocho años uno gana cierto equilibrio y dominio, pero aun en mi caso, habiendo adquirido mucho equilibrio, buenos reflejos, mucha fuerza, y control de nervios [modestia aparte :-)] no hago "mis trucos" todos los días aún, menos en los hotspots, elijo por eso días de paro, de elecciones, día del peatón, parques públicos [¡pero ya no con nieve ni lluvia!],;en la calle mi seguridad esta ante todo y muy por encima de querer impresionar a quien sea.

En realidad, todo es sentido común, el miedo se vence de a poco; en Suiza y en Cochabamba comencé por distancias cortas, por calles fáciles, subiendo a la acera, a medida que uno gana confianza aumenta en distancia y en dificultad y uno llegar a intuir el modo de pensar de los conductores.

Como cristiano, siempre agradezco a Dios, por un día más sin incidentes.

Por ultimo y por extraño que parezca, y al menos en Cocha, conozco mucho más gente que tuvo accidentes en auto o en moto (en ese orden) que en bicicleta, ¿increíble? pues ¡créanlo! (también pregunté a gente que trabaja en emergencias).

Próximamente lo bueno lo malo y lo feo de un automóvil (en particular el individual).

20.03.2010

¿Por qué interesarse por la ecología?

* Respuesta clásica: "por las futuras generaciones"
* Respuesta contemporánea: "por las actuales generaciones, siendo los niños, la gente mayor, y la gente de escasa economía los más afectados".
* Respuesta egocéntrica [a quien corresponda]: por evitarse enfermedades, alergias, problemas respiratorios, esterilidad, calvicie, problemas hormonales, algunos tipos de cáncer...
Por otro lado, la expresión del "amor al prójimo" ve en la ecología una manera de concretarse.

Próximamente: los secretos de un ciclista urbano con 8 años de experiencia y ni un solo accidente...

28.02.2010

--> ¿Por qué el ciclismo urbano?

* por salud (vitamina D, ejercicio aeróbico, fortalecimiento de piernas, posibilidad de "spinning")
* por practicidad (en el centro urbano nada la iguala, en velocidad, dinamismo, lugar para estacionar)
* por la posibilidad de ir a su ritmo
* por la libertad de tomar rutas diferentes, y tener el tiempo de admirar más detenidamente la ciudad
* por compromiso ecológico y humano (afrontémoslo, el vehículo individual es una aberración energética aun más en lugares planos y en recorridos de no más de 5 km de distancia).

15.02.2010

--> Con las herramientas y el conocimiento adecuado no hay mejor reparación que la que uno mismo hace.

--> En regla general, ningún auto ni moto es más efectivo como medio de desplazamiento en lo que respecta el centro de la ciudad.

--> Hay solo un lugar en Cochabamba donde la gente va más rápido a pie que en bici o en auto, el mercado la Pampa en día de feria: sábado y miércoles.

11.02.2010

--> El ciclista urbano no teme la lluvia, pero si la oxidación de las piezas metálicas recién limpiadas y aceitadas.

--> El ciclista urbano sabe que el freno y los guiñadores evitan más accidentes que la bocina; lastimosamente los conductores de autos no están al tanto.

Tres molles menos

En la calle Araona (una cuadra al este de la avenida Villavicencio) o continuación de la calle de ese nombre, primera cuadra yendo al sur de la avenida Tadeo Haenke, acera naciente, lote baldío (sigue así), habían seis molles. Ahora hay solo tres. Quedan, arriba, dos árboles, uno viejo y de tronco delgado y retorcido, el otro no tan viejo y más normal, y abajo, un tercer árbol. Hace unos diez años, a los seis les quitaron sus ramas secundarias hasta los cinco o seis metros de altura. Yo pasaba por ahí cada tanto para verlos. Me descuidé unos meses, y perdí la ocasión de ver la tala fresca. La tala debe haber sido hace unos dos meses, pues no hay rastros recientes, y los cortes en los existentes tocones muestran esa antigüedad.

Habrá sido el 2005. Vivía por ahí, pasaba cerca cada día. Vi esos seis árboles, y no recuerdo qué cosa me hizo sentir que estaban en peligro; quizá fuera la reciente tala de los ciento cuarenta árboles de la subida al Seminario. Hablé con los vecinos. Escribía una columna impaga en el diario Opinión, "Desde la bicla". Hablé a la persona encargada. Me dijo que escriba algo y me prestó al fotógrafo. Fuimos, el flaco sacafotos en su moto y yo en bici, charlando. Unas doscientas palabras (cantidad parecida a la que tendrá esta entrada que tú lees). ¿Qué escribí? No lo tengo a la mano, y no lo buscaré; estará en el archivo del periódico.

Siento pena.

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Marzo 2019. Solo queda un molle. Construyen una barda o muro que cierra la propiedad, para eso. Cortaron dos de los molles.

Función natural en lugar todavía abierto

Disminuye el disturbio que hizo en el agua el dedo gordo del pie de un hombre, se aclara el agua. Las paredes de piedra musgosa contienen a un hombre que de cuclillas sobre el suelo de tierra, sin pisar las circundantes plantas verdes, variadas, raras, evacúa el vientre. Arriba, la avenida continuación Perú es vía de paso de motores desenfrenados. Alguien que dentro de la cabina alta de un camioncito lleva adelante su motor pudo o no ver, abajo, al hombre que ahora se para y lleva en una mano papel blanco a su trasero. Hay basura entre el verdor o asomando a la superficie del agua del canal. Una a dos cuadras arriba del cruce de la Medinaceli con Juan de la Rosa es el lugar donde a un hombre le fue fácil bajar al canal central. Sale desde abajo un hombre, cruza a pie la avenida, un ciclista destraba su bicicleta de un poste de señal de tráfico, sube a su máquina, y se va.

Bradbury

Bradbury estuvo casado con Marguerite McClure ... desde 1947 hasta que ella murió; tuvieron cuatro hijas: Susan, Ramona, Bettina y Alexandra. Bradbury nunca obtuvo una licencia de conducir [vehículos a motor] y en cambio usó el transporte público o su bicicleta. Vivió en su casa hasta que a los veintisiete años se casó. Maggie, como le decía con cariño, fue la única mujer con la que Bradbury salió. (Traducido de https://en.wikipedia.org/wiki/Ray_Bradbury#Personal_life.)

Bradbury lamentaba nuestra creciente dependencia de la red Internet, diciendo: "Distrae, no tiene sentido, no es real. Está en el aire en algún [ningún] lugar". (https://web.archive.org/web/20111001142931/ ; http://www.switched.com/2009/06/25/author-ray-bradbury-on-the-web-not-real-its-in-the-air-somew/ ; https://web.archive.org/web/20120610074749/http://www.nytimes.com:80/2009/06/20/us/20ventura.html?_r=1)

Aquí, https://genius.com/4067687, un poema de Bradbury.

Pasaje de Bradbury citado por K.Amis en 1960, New maps of hell: a survey of science fiction, New York :

Al escribir la novela corta Fahrenheit 451 pensé que estaba describiendo un mundo que podría evolucionar [así] en cuatro o cinco décadas. Pero hace solo unas cuantas semanas, una noche en Beverly Hills, un hombre y su mujer pasaron a mi lado, con su perro. Me quedé mirándolos, absolutamente aturdido. La mujer sostenía en una mano una radio de tamaño de cajetilla de cigarrillos, con la antena vibrante. De ella salían unos delgados cables de cobre que terminaban en un refinado cono enchufado a su oreja derecha. Allá iba ella, olvidada del hombre y el perro, escuchando lejanos vientos y susurros y chillidos de novelas, caminando como sonámbula, y su esposo -- que bien podía no haber estado allí -- la ayudaba a subir y bajar las aceras. Esto no era ficción. (https://en.wikipedia.org/wiki/Ray_Bradbury#Cultural_contributions)

Ray Bradbury sobre la perduración de su novela -- o grupo de cuentos -- Crónicas marcianas: La fantasía es una representación de lo irreal. Así, las Crónicas marcianas no son ciencia ficción, sino fantasía. No podrían suceder, ¿entienden? Por esta razón permanecerán durante mucho tiempo, porque se trata de un mito griego, y los mitos tienen poder de permanencia. (Traducido de (https://en.wikipedia.org/wiki/Ray_Bradbury#Writing.)

Ver más de Bradbury en el cuaderno archivo, https://archivociclista.blogspot.com/2017/08/referencia-seis-cuentos-de-ray-bradbury.html

Malas noticias

Una comisión del Congreso quitó la intangibilidad del Tipnis que logramos en octubre de 2011, yendo así a la construcción de una carretera que mataría a los pueblos-naciones de ese territorio indígena y parque nacional y destruiría bosques y animales salvajes. Nuestra lucha lo impedirá.

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El Concejo municipal aprobó la Ley de la bicicleta, que va contra los ciclistas, pues puja por ciclovías. Desenmascaremos al grupo autobautizado "Masa crítica-Cbb" que redactó y promovió esa ley, apoyado por la Cámara de industrias...

Mientras tecleo esto, le dan manija en la televisión (9 de la noche, canal C, el entrevistador es un tal Mauricio) al tema: el presidente del Concejo (es un hombre de terno, moreno, de unos 50 años) habla de que la Ley "va a mejorar la salud"... "Se les va a dar un carril exclusivo... y puedan todos los ciclistas manejar con seguridad. Se va a empezar a respetar al ciclista... también con señalizaciones horizontales, verticales".

Y sigue hablando de la ampliación de las ciclovías: "carril exclusivo de las bicicletas". "El más importante colectivo con que se ha coordinado es Masa Crítica". "Ellos tienen que adecuarse a todas las señalizaciones que rigen en una calzada: ... semáforos... bicicletas no respetan las señalizaciones... Ahora sí van a respetar".

(Qué evidente es el error de estos bien intencionados: nos ponen en evidencia, cuando nuestra posición, en la relación de fuerzas, es desventajosa : como ciclistas somos, hoy, aquí, incapaces de hacer respetar nuestros derechos en la escena oficial. Qué dañinos llegan a ser los bien intencionados.)

"... o ir a su lugar de trabajo o ir a la universidad". "Lo que estamos haciendo con esta ley es dar seguridad, e inversión con todas estas ciclorrutas".

"Inclusive nos han mostrado esa Raleigh que tenía su placa".

"Vamos a lograr la calidad de aire en el municipio. Ahora lo que vemos es 2, 3 bicicletas, porque se ha ido masificando. ... Ayudar para que tenga seguridad, van a tener seguridad, van a tener un carril exclusivo. Vamos a exigir a todas las entidades... parqueo."

"Primero tenemos que hacer ((ciclovías en las)) vías estructurales, un ejemplo, Heroínas, Ayacucho, Blanco Galindo".

"Gracias a los colectivos como MC, que están creciendo día a día".

-- Y sigue hablando de cómo mejorarán el tráfico. No sé qué de intervenir en las horas picos...

Es insoportable el modo, el estilo del político. Es dañina la misma función del político, lo que hacen está de más, es solo mentira para esconder la destrucción que hacen, que es lo real.

Hallaremos la manera de mostrar las mentiras de toda esta gente.