sábado, 26 de septiembre de 2020

Se soltó el bestiario (ciclistas nuevos en las calles del valle)

Ya durante el encierro por enfermedad mundial, aquí en el valle casi del todo urbano de Cochabamba, aumentando los ciclistas porque era más fácil moverse así que a pie, y en automotores casi nadie salía, se soltó el bestiario de nuevos, inusitados ciclistas. Es un insectario más un aviario más un ictiario (catálogo este último de peces).

A ver. Una mujer flaca, mínima, sobre una bici pequeñita, que por una calle de la zona de los mercados en la ciudad, va contrarruta, pero a una velocidad que la hace, a ella y a su bicicleta, peligrosas para los circunstantes... (Seguiré el inventario.)

sábado, 19 de septiembre de 2020

No luna, sino luminaria

No es que la luna me haya nunca asustado, pero la otra noche madrugada cuando por un instante pensé que eso brillante, pequeño, hecho de luz, podía ser ella, colgando allá de tres pisos de pared desnuda y claustra de una casa, sentí temor: a la luna le tocaba ser nueva u opaca ese día, y su hora de salir era más tarde que entonces.

Mirando la cosa, era una luminaria intensa, de esas que reapaldan a una de las cámaras filmadoras cuyo espiar se guarda para que unos vecinos preparen de repente acusaciones contra quienes -- vecinos también ellos -- se alunan con el brillo sombrío de la propiedad de los vecinos. El foco desnudaba un patio-lote vacío, desierto, pelado como escena para nadie allí.

domingo, 13 de septiembre de 2020

En Illataco, nos damos el saludo

En Illataco, las gentes nos saludamos al pasar cerca unos de otros en las calles, sin importar que sólo nos conozcamos de vista, o de saludo. Baja uno por los Álamos hasta donde el Justico, y uno deja de saludar y no espera ser saludado, y lo mismo pasa en Ch'ulla, en Jayata, en Paukarpata.

viernes, 11 de septiembre de 2020

Dos extremos a los que vale la pena frenar el coche en Illataco



a esta hora, antes de media noche, un camión cisterna de la planta Pil llega al centro de acopio y recoge (succionando) la leche del acopio de una cuadra abajo de la plaza, teniendo, mientras lo hace, cinco a diez minutos, encendido su motor, con un ruido exagerado. Cuarto de hora después, en el acopio de Puente Gamboa, tres cuadras abajo, el mismo camión, otra vez... Bien podría la gente de la Pil hallar la forma de aligerar ese ronquido de sus carros

el vibrar traqueteante de los motores de refrigeración de esos dos acopios de leche para los que viven cerca tiene que ser atontador; para mi suerte, donde vivo queda a dos cuadras arriba y abajo de cada cual

a las seis de la madrugada pasa por aquí, a toda velocidad y bocineando como para inflamar los tímpanos, el carro recogebasuras de la alcaldía. Quillacollo puede educar a sus choferes para que no hinchen así las pelotas de los vecinos.

En bicicleta, lento

Nada mejor que ir lento en bicicleta; mientras más lento, mejor; pero, claro, la cosa es moviéndose; no vale estar detenido del todo, porque eso deja de ser ir...

Hoy, en mi octavo día continuo de salir en bici, volví con gusto a alcanzar una velocidad parecida a la que usaba en el tiempo anterior al encierro enfermatorio mundial... que parece que aquí en Cochabamba está por acabar, o al menos, por relajarse tanto que no sera ya encierro.

jueves, 10 de septiembre de 2020

Desayunaba, me caí de la bici, seguí desayunando con algún dolor

Relajado en la mañana, llegado al parque la Torre, iba a bajar de la bi, llevaba pan con quesillo en una mano, la rotura del pantalón en la rodilla se aficionó del asa del manubrio; tardé en caer, caí doblando levemente el tobillo. Al ir aliviándose el dolor, a los minutos del estirón, es agradable.

lunes, 7 de septiembre de 2020

Sí, con la enfermedad mundial, hay más ciclistas Cochabamba

Se ven más personas en bicicletas por las calles de Cochabamba. Y sí, espero que, una vez acabe del todo la cuarentena por el virus global, algunos de estos nuevos ciclistas perseveren, se queden en las calles sobre sus bicicletas.

Lo rico de esto, lo que a mí me entusiasma, es saber que será inevitable que unos buenos cuantos de esa gente ciclista diaria nueva, aprenda una y cien mañas ciclistas de calle, ante, contra y por en medio de los congestionantes autos y de los que los manejan. Y los nuevos, necesarios modos de calle diaria -- algunos impensados, nuevos de veras -- de esa muchachada les harán criar una conciencia, solidez ésta que les llevará a actuar. Así espero que sea.

Después de ser operado de la próstata

Un equipo médico retiró la próstata de mi cuerpo. Ahora no soy el mismo, digo que soy menos, soy el de antes menos la próstata... No entiendo cómo, pero este ser diferente hace que al hablar diga menos cosas, y también que piense las cosas de maneras diferentes, de maneras asombrosas, deslumbrantes, a veces, tenebrosas, otras veces, pero siempre pienso las cosas como..., a ver, digamos, como si yo fuera nuevo, otro, como si fuera una wawa que ve las cosas de repente, por primera vez y se queeeda mirándolas. Así, con este diferente pensar mío y mi menor necesidad de decir cosas, este cuaderno será menos impotable.