Jueves, 20 de mayo de 2010
Carta al parcero David
Esperando estés sano, tranquilo, ya en tu casa en Ibagué o a punto de llegar.
Como habrás visto por la carta anterior, piden nuestro material del evento que hicimos en la conferencia de Tiquipaya, para publicación. Si ustedes como cicloexpedicionarios o tú personalmente tienes alguna adición que hacer, te ruego me la participes, o se la envíes directamente a la encargada de la publicación, Jhovana.
Aquí haremos, en seis semanas, el Coloquio de la bici número 3, apuntando otra vez más a ancianos ciclistas. Sigo ubicando, de a uno por semana, a viejos ciclistas, en las calles, y hablando con ellos, tratando de comprometerlos. La reunión de ciclistas de los miércoles tuvo su quinta edición anoche (en la primera, del miércoles 14 de abril, participaste tú con Diego cicloexpedicionario), con ocho asistentes, contando a mi hijo Ernesto. Hizo cada quien una relación del incidente de hoy en la calle (mi hijo se cayó al doblarse su manubrio montando rompemuelles con las manos sueltas, con chinchón en la ceja, que lleva cubierto con parche de periódico con jabón; Valentín tuvo altercado con una insistente motorista; Dania hará arreglar su bici; Alexis sigue pinchando llantas; recién revisando por fuera llanta repinchada, halló don José delgado alambre pinchador, de esos que botan las viejas llantas deshechas de los carros). Contra mi deseo de hacer una reunión corta, a hora fija, de veinte minutos a media hora, he debido adaptarme a la dinámica propuesta por los ciclistas (que son gente que termina su jornada de trabajo o estudio u otra actividad, y no tiene hora fija de llegar, ni hora fija para irse), que es reunión larga: estoy cada miércoles en la plaza desde las ocho, y hubo veces en que recién me retiré cerca de las once de la noche... Hay miércoles en que, además, hablo sobre otros temas al lado del panel, con lo que puede que pase en la plaza, hasta cuatro horas, hablando, escuchando.
Cada miércoles llego a la plaza con miedo de que no llegue la gente. Anoche, recién a las ocho y media llegó Dania, nueva en el grupo. A las nueve estaba otro ciclista urbano, Valentín, que asistió al evento de la Bici resiste al capitalismo industrial, en Tiquipaya. Luego invité a don José Villarroel, el ciclista de setenta y pico años. Llegaron Alexis, Jhonny. Se sumaron otros dos, y hubo reunión. Así es, de a poco, con paciencia. Sobre todo, escuchando, estando abierto a lo que quiere la gente. Tengo mucho por aprender.
Hubo dos miércoles en que, volviendo tarde en la noche a Tiquipaya, la reunión tuvo una continuación, rebrote en plena calle, donde abordé a ciclistas para convocarlos con nosotros en la plaza, la semana siguiente. Y hablando, charlando, al final llegamos a casa cerca de medianoche.
Gracias, David, por el ejemplo de compromiso con apertura, perseverancia que nos diste aquí en Cochabamba, por el aliento, el coraje que me dio tu compañía aquí, para iniciar esta actividad, que está empezando a cuajar, con, por el momento, cartas pidiendo a autoridades parqueos para bicis, y que los escapes de las motos no nos lleguen a las caras. También estamos averiguando estadísticas de accidentalidad. Hay propuesta una carrera de bicis a hacer en el barrio de la Tinkuna, en un mes. Un concurso de bicis adornadas... En fin, hay ideas, hay entusiasmo. Dependiendo de cómo lo hagamos, habrá obra, resultados.
El próximo miércoles saldremos en una cicletada, a las nueve y diez de la noche, que durará, espero, hasta unos veinte minutos, ya se verá si antes o después de la reunión. Bastará que seamos cuatro.
Ya aparecieron las divergencias políticas en medio del grupo, lo que es sano, representa una explicitación de la realidad de que en un grupo de personas habrá siempre divergencias, y hay que manejarlas, tomarlas en cuenta, a veces sorteándolas, otras veces, sofocándolas, pero no sin antes haberlas dejado en claro, ponerlas a decisión.
La línea principal de la acción política del colectivo de los Ciclistas del valle = Ciclovalle (nombre adoptado por el grupo, contra mi sugerencia de que fuéramos Defensa Ciclista Cochabamba, Ciclabamba) espero que sea la de (1) una alianza con los peatones, nuestros aliados naturales para defensa legal y demandar a las autoridades cambios legales que nos den espacio, respeto y seguridad, (2) expresión de nuestras ciclofrustraciones (palabra de Robert Silverman, activista ciclista ya fallecido en Montreal) o sea, protesta en las calles, (3) acudir a las organizaciones sociales, hablar ante ellos, buscar convencerlos de la necesidad de rediseñar nuestras ciudades, creando cercanías, de discutir los caminos para salir de la economía del crecimiento ilimitado con sobreconsumo.
Acabo de salir de una reunión de la comunidad de instituciones y organizaciones de derechos humanos en Bolivia, donde se presentaron los resultados preliminares del examen periódico universal sobre derechos humanos realizados al país Bolivia, por el Consejo de Derechos Humanos de las NNUU, examen que se realiza por primera vez, y que se repetirá en cuatro años. (Estén atentos en Colombia, amigo, al examen que se hará a su país.) Planteé que ciclistas y peatones somos un grupo social vulnerado en nuestros derechos humanos a: vida, integridad física, salud, libre circulación y ambiente (aire) limpio, y que no se respeta nuestro derecho al uso público de espacios públicos (las vías que son cada vez más privatizadas por el uso motorista de ellas). Habrá tiempo, hasta la primera semana de junio para presentar vía e-mail un documento (que se basará en lo hecho para el evento autogestionado que organizamos con tus compañeros aquí en Cochabamba, el 21 de abril) que pediremos a alguna institución con representación en Ginebra, Suiza, presente a la octava sesión del Consejo de DDHH, con estas reivindicaciones ciclistas y peatonales.
David, esta fue una panorámica de la actividad aquí. Espero no perdamos el contacto. Espero me cuentes lo que hacen allá en Ibagué, y en general en Colombia. En semanas tendré lista una versión de las notas que hice sobre las cosas que me fuiste contando sobre tu país y los ciclistas especiales de allí, los proyectos que iniciaste, para que tú le hagas las adiciones necesarias. Cuenta también cómo les va yendo a los cicloexpedicionarios.
Vaya usted con viento de cola.
David respondió:
Viernes, mayo 21, 2010
Hola, mi estimado amigo... te cuento que aun me encuentro en el norte del Peru, estoy subiendo despacio recogiendo los pasos dejados en nuestra bajada... consolidando los contactos y bueno promocionando la propuesta de la cicloexpedicion... te escribo luego con algunos aportes sobre la actividad de Tiquipaya... estoy tratando de bajar unas fotos y un video... para enviártelo.
Estoy en Chimbote con los amigos de biciRED... este es su link http://bicired.bligoo.com.pe/ y el correo de oscar es oscar_natura@yahoo.com y natura.chimbote@gmail.com
Contacté ellos estan interesados en relacionarse y crear y fortalecer la RED DE LA CICLOEXPEDICION POR SURAMERICA.
Un saludo a tus hijos.
Fraternalmente,
David Toro
