domingo, 22 de marzo de 2015

Perro en la calle, cruzando la calzada

Es un perro que camina por la calle, más exactamente, por la calzada, el espacio de los carros. El perro cojea o renguea (¿cuál de las palabras se adecúa?). Cuando el carro azul (pero ¿qué importa el color, en este caso?) deja de aproximársele y de tocarle la bocina (suaves toques cortos, insistentes), cuando el perro deja la calzada y sube a la acera, y pasa a andar lento (ahora se ve cuánto se apuraba el animal al cruzar la calzada, cuánto lo agitó el acoso motorista), deja de renguear.

Es un perro de hasta tres años, grande, no flaco pero sí delgado, su color es marrón hondo, como el del líquido té cargado, es un perro serio o al menos parece, ahora, tener un propósito, ir hacia un objeto.

En las calles de Cochabamba se ven perros que cojean o renguean. Me pregunto si algunos de ellos fueron golpeados por motoristas.

Hace unos años, B. me contó del ¿suizo o sueco? experto en tráfico que le dijo que en esta ciudad veía a los perros hábiles para moverse en el tráfico, como si hubieran aprendido, como si fueran inteligentes.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio