Bolivia hoy (3) : se esfuman los bolivianos concretos

Ellos creen que están bien. Pero no tienen otro criterio de bienestar que la panza llena y la cabeza volada, los sentidos anestesiados. Hay que ver la pinta que se dan, cómo contonean su paso, llevando la bolsa de compras por la calle, el estilo con que suavemente agarran el volante del carro, hay que oírles la caballerosidad ante sus sirvientas, la seguridad de las sirvientas de que, dejando en unos años de serlo, se habrán "sacrificado por su familia", la suficiencia con que siguen bebiendo en fin de semana... Si hasta creen que les va bien, si hasta saben que terminarán bien.

Desaparecidos los medios para hacerse de criterios para ver, saber qué es el bien, qué es el mal, volada la mente por la una o dos películas semanales que se tragan, por la propaganda hecha en Bolivia con la que miden su cercanía a sus modelos, no sabrán las y los bolivianos que están desapareciendo como tales, se están esfumando, hoy, en el año 2017, convertidos en casi nada, en pronto solo humo, y algo más tarde en ni el rastro del humo.

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Practican en muchos lugares públicos, de noche, grupos de bailantes, para salir en alguna próxima entrada folklórica. Usan reproductores de música grabada, con gasto de electricidad. Formulación de la enajenación señalada arriba : Se disfrazan -- los veo -- de lo que aun son, para, en la mímesis esa, dejar ya de ser esto que son; digo, se despiden de su ser, siendo un rato más, por última vez, lo que son. -- Esta es una fórmula para debatir.

Sobre bailantes que practican al aire libre, ver http://cuadernociclista.blogspot.com/2015/02/a-partir-de-un-baile-ensayado-visto-en.html.